El caracol Cardín.
Personajes: Narrador, Cardín, Catarinas, Mariposas, Caracoles, Hada, Luna, Pez.
Narrador: Señoras y señores vamos a representar la historia de un pequeño caracol que vive en este bosque.
Entran los caracoles listos para iniciar una carrera, las Mariquitas cantan y las Mariposas bailan entre las flores.
Narrador: Todos los animales eran muy felices en este lugar encantado, porque jamás había entrado algún ser humano. Y ellos tenían como regla principal nunca salir del bosque. De pronto, un horrible grito interrumpió su festejo.
Catarinas: ¿Qué fue eso?
Mariposas: ¿Qué sucede?
Entra el caracol Cardín llorando y gritando.
Caracoles: ¡Qué horror ?
Cardín: ¡Bua, Bua!
Caracoles: ¿Qué pasa?
Catarinas: ¿Te has golpeado la Cabeza?
Mariposas: ¿Te duele la barriga?
Cardín: ¡No! ¡No! ¡Y mil veces no! (Se tira al suelo y sigue gritando)
Narrador: Cardín lloró por horas. Y sus amigos estaban desesperados.
Catarinas: ¡Dinos que te pasa!
Mariposas: ¡Déjalo, está enfermo!
Caracoles: Nos ablandarás con tus lágrimas.
Catarinas: ¡A callar todos!
Caracoles: Tenemos que encontrar una solución. Llamemos al Hada Margarita
Todos: ¡Hada Margarita! (y entra el hada)
Hada: ¿Que pasa amigos?
Caracoles: Oh pequeña hada, tenemos un gran problema
Catarina: Cardín ha llorado tanto que está a punto de inundar el bosque. ¡Ayuda!
Hada: (Se acerca a Cardín). ¿Por qué no dejas de llorar y nos dices que sucede?
Cardín: (Se seca las lágrimas). Fui a dar un paseo y vi una cosa.
Caracoles: ¿Fuego?
Mariposas: ¿Un monstruo?
Cardín: ¡Vi la casa de los humanos!, Bua, Bua
Hada: ¿Pasaste los límites del bosque?
Cardín: Sólo un poco. Y me ha gustado su casa, también quiero que la mía tenga techo y puertas.
Hada: Pero, tú tienes una casa que es perfecta para los caracoles.
Caracoles: Es verdad, es perfecta y nos gusta
Cardín: Bueno, yo seguiré llorando hasta que tenga una casa como la que deseo.
Todos juntos: Hada por favor ayúdalo, no podemos soportar más su llanto
Hada: Bien. Te voy a dar un nuevo hogar. Cierra los ojos. (El hada menea su varita mágica y convierte su caparazón en una casa).
Todos juntos: ¡Ohh!
Cardín: ¡Wow! ¡Maravilloso! (Da vueltas y vueltas presumiendo su nueva casa).
Narrador: Cardín quería enseñarles a todos su nuevo hogar, pero llegó la noche y todos los animales se fueron a dormir.
Cardín: Yo no quiero dormir. Voy al río a beber y enseñar a mi casa a la Luna. ¿Has visto una casa como esta Luna? (decía el caracol presumiendo)
Luna: ¡Bahh! Yo he visto maravillas. Castillos y palacios mucho mejores que tu casa.
Cardín: (Con mueca de desaprobación) ¡Que desagradable!
Narrador: Cardín se acerca al río a beber. Pero su casa es tan pesada que de cabeza al agua.
Cardin: ¡Socorro!
Pez: ¿Qué tipo de pez es usted?
Cardín: Un caracol, ¿Me puedes ayudar?
Pez: ¡Imposible!, no sé cómo hacerlo
Cardín: Luna, ¿Puedes ayudarme?
Luna: ¿Qué debo hacer?
Cardín: Llama al hada Margarita
Luna y Pez: (Gritando) ¡Hada de la margarita!
Hada: ¿Quién me llama?
Cardín: Hada, por favor ayúdame, quítame este peso inútil.
Hada: Lo haré si prometes no ser tan caprichoso y chantajear a otros con tus lágrimas
Cardín: Sí lo prometo.
Narrador: El hada le da la mano para sacarlo del rio, después despierta a sus amigos, y frente a ellos le devuelve el caparazón. Desde entonces, Cardín dejó de ser tan caprichoso.
¡Y colorín colorado, el cuento del caracol Cardín ha terminado!